FORO JAVERIANO

Para esta ocasión, quisimos entrevistar a Laura Robledo, Santiago Piedrahita y Alejandro Gómez; una profesora y dos estudiantes de nuestra facultad, quienes decidieron unirse para lanzar, a través de una plataforma virtual, un gran proyecto que busca acercar y facilitar el uso de las distintas herramientas jurídicas, no solo a los abogados, sino también a todos los ciudadanos. Nos contaron un poco acerca de ellos mismos y de la idea de este proyecto. 

 

1. ​¿Cómo se conocieron? Y ¿por qué decidieron crear juntos una plataforma como Amigo Legal?

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Laura Robledo: Esta idea la tengo desde hace muchos años. De hecho, hace poco mientras organizaba mi casa, encontré una libreta, con fecha del 2012, en la que tenía diseñado un prototipo de la página web de Amigo Legal. Sin embargo, esta idea la postergué por varios años y no fue sino hasta el segundo semestre de 2017 que arranqué a trabajar en este proyecto en forma. Era una versión de esta misma idea, pero mucho más reducida de lo que es ahora.

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Santiago Piedrahita: Casualmente, con Alejandro, teníamos una idea muy similar a la de Laura. Por cosas de la vida, vimos clase con ella el semestre pasado y conocimos Amigo Legal. Un día nos acercamos con la intención de que nos diera algunos consejos y nos hablara de su experiencia. Sin embargo, a ella se le ocurrió la idea de que nos uniéramos a su proyecto. Claramente Alejandro y yo aceptamos, y cuando terminamos de hablar con ella, no solo salimos con excelentes consejos, sino con una súper socia. 

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Alejandro Gómez: Además de que el equipo se robusteció con esta unión, la plataforma y la oferta que ya existía, también. Entonces, esta idea terminó siendo realmente provechosa para todos.

 

2. ¿En qué consiste Amigo Legal?

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Santiago Piedrahita:Es una plataforma virtual que busca, principalmente, tres cosas: primero, ofrecer instructivos gratuitos, es decir, instrucciones básicas para los trámites que más deben adelantar los colombianos. Segundo, brindar documentos jurídicos, de alta calidad, a precios asequibles (el precio promedio de los documentos está entre $10.000 y $15.000) y, por último, ofrecer, concretamente, servicios jurídicos. Esto ya implica asesoría en temas puntuales. 

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La idea es, por un lado, llegar a personas que no tienen claro -o a quién preguntarle- cómo redactar, por ejemplo, un contrato, una tutela o un derecho de petición y, por otro lado, la intención también es ayudar a pequeños emprendedores que recién están comenzando y no tienen suficiente dinero para contratar servicios jurídicos de alta calidad.

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Laura Robledo: Con este proyecto, tenemos tres pilares fundamentales. El primero, es democratizar el derecho; el segundo, es romper las barreras que el ciudadano de a pie tiene respecto del mismo; y, el tercero, es utilizar la tecnología como medio disruptivo pues, el derecho se ha quedado un poco rezagado con respecto a los avances tecnológicos de hoy en día. 

 

3. ¿Cuáles han sido los mayores retos para ustedes hasta ahora?

 

Alejandro Gómez: Principalmente han sido dos. El primero de ellos, ha sido aprender a delimitar qué cosas podemos hacer y qué cosas no, porque puede pasar que algunas personas nos contacten y nosotros, aún, no tengamos el grado de especialización frente a todos los temas. El segundo reto, ha sido lograr poco a poco que las personas confíen realmente en nosotros y en esta plataforma. En Colombia, desafortunadamente, la población considera todavía que los servicios en internet no son seguros y les causa temor dejar en línea los datos, por ejemplo, de las tarjetas bancarias. Sin embargo, hoy en día, y cada vez más, se pueden llevar a cabo todo tipo de operaciones a través de internet y creemos que el derecho, definitivamente, no puede ser la excepción. 

 

Foro Javeriano, los invita a conocer y apoyar esta gran iniciativa, y a animarse para concretar y llevar a cabo las ideas o proyectos que cada uno de ustedes tiene, o pueden llegar a tener. En muchas ocasiones, las oportunidades están más cerca de lo que creemos y a veces, simplemente, basta con dejar a un lado nuestras inseguridades para dar el siguiente paso y, así, tomar una decisión que puede llegar a ser realmente enriquecedora y provechosa, no solo para nuestras vidas, sino para la de los demás también.