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ESPECIAL

Ahora los partidos de Catar tendrán sentido

¿Cuál es la madera de político? 

Estamos acostumbrados a oír la frase “tiene madera de1 político” pero esto desarrolla dos grandes interrogantes ¿Cuál es la madera de político? Y ¿Cuáles son las características personales que debe tener un buen político? 

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Por: Alejandra Lucía Vélez Bellini  

Foro Javeriano se sumerge en la tormenta de la política y lo analiza desde una nueva perspectiva pues “un discurso nuevo no debe verse con malos ojos, la rebeldía política del pasado es ahora la revolución del futuro”. Esto quiere decir que confiamos como dijo Mao Zedong que “la juventud es la fuerza más activa y vital de la sociedad. Los jóvenes son los más ansiosos de aprender, y los menos conservadores en su pensamiento”; por eso ¿quién más que los jóvenes políticos para darnos una visión nueva y refrescante de lo que se ve dentro de ese monstruo que llamamos política? 

Para poder inspeccionar la madera de político entrevistamos a dos jóvenes candidatos: Mariapaz Buitrago (candidata a edil de Chapinero por el Centro Democrático con el número 81 encabezando la lista del partido) y Jorge Maldonado (candidato al concejo de Chía número 11 por el Centro Democrático).  

  1. ¿Qué lo incentivó a ser candidato?   

M.B: Tengo que empezar diciendo que esta locura no es de ayer. Toda mi vida he estado involucrada en los temas que tengan que ver con mi país, siempre me ha dolido mi país y, a su vez, me ha interesado su historia. He estado involucrada en todo tipo de actividades donde el común denominador era el debate y la solución de problemas. Por ejemplo, foros políticos, fui representante de mi colegio, secretaria general de Naciones Unidas, siempre participe en actividades de servicio social, entre otras. Ahora, el año pasado empecé a trabajar con el senador Miguel Uribe como pasante en su UTL, y se me presentó la oportunidad de postularme como candidata; en el momento sabía en mi interior lo que quería pero decidí tomarme el tiempo para procesarlo y tomar la mejor decisión.  

Al final, terminé tomándola después de una conversación con mis amigos en el Giraldo, donde llevábamos horas hablando de la situación del país, la inseguridad, la incertidumbre, muchos hablaban de terminar la universidad y hacer todo lo posible para irse ahí mismo a cualquier otra parte del mundo. En este momento, tomé la decisión, me cansé de esperar el cambio, quería construirlo, quería tomar un paso adelante y pasar de la palabra a la acción. Hacer algo más, que solo sentarme a criticar, esta era mi oportunidad. Definitivamente, estamos viviendo un momento crítico en donde los jóvenes necesitamos tomar ese tipo de responsabilidades y ese tipo de compromisos con nuestro país.  

J.M: No era algo que tuviese en mente, no me proyectaba como un político. Siempre he visto muchas falencias en la administración, específicamente en la de Chía. Y en cierto punto quise hacer algo distinto; salirme de la empresa privada y dar un paso adelante para hacer algo distinto. Dejar de criticar y tomar la iniciativa en mis propias manos.  

 

  1. ¿Cómo escogió con qué partido lanzarse a esta nueva aventura?  

M.B: Personalmente yo escogí el Centro Democrático, primero, porque fue el partido que me abrió las puertas y me dio la oportunidad y, honestamente, creo que hoy en día esto no es muy común. El Centro Democrático siempre ha tenido esa idea de buscar nuevos liderazgos. Lo segundo, y lo más importante de todo, es que fue el partido que desde el día uno le hizo oposición a este Gobierno, siempre ha sido coherente y creo que es un partido que no improvisa, lo que hace y lo que dice es con autoridad para hablar de tema, como un partido sensato.  Esas características son difíciles de encontrar en la política.  

J.M: Primero yo desde joven siempre he sido muy seguidor del doctor Álvaro Uribe Vélez, creo que eso no es muy común en mi generación, por lo que ha sido un reto muy grande manejar esa ideología. También me motivó ver la decadencia del país y de los gobernantes que tenemos hoy en día. Ver cómo se va dañando más y más la sociedad y específicamente ver como municipios como Chía, que tienen un inmenso potencial se dejan perder por los gobernantes que tienen.  

3.     ¿Qué consejo les daría a los jóvenes que también se proyectan como políticos? 

M.B: Lo primero es que, si ya tienen esa iniciativa, sean muy verdaderos a sus principios y a sus valores. Lo importante a lo largo del camino es mantenerse coherentes con sus creencias y no permitir que el mundo los lleve a no ser leales a su verdad. Si el mundo no lo acepta, no importa, sigan adelante con su proyección y no piensen que decir algo, está mal, o creer algo, es lo incorrecto. Mejor dicho, hablen con la verdad y sean transparentes consigo. Si ustedes defienden lo que verdaderamente creen, entonces las cosas terminarán saliendo bien.  

J.M: Primero que todo les diría que den el paso, si no dan el paso no van a llegar a ningún lado. Pero como candidato les recomendaría ser muy precavidos con todo lo que dicen, con todo lo que hacen y con su forma de actuar porque todo conlleva un resultado. Si uno hace las cosas bien, a conciencia y honestamente se puede llegar a hacer cosas muy grandes y bonitas por la gente, y, al fin y al cabo, por el país.  

4.  ¿Para usted, qué características fundamentales debería tener un líder?  

M.B: Inicialmente debe tener las cualidades esenciales de cualquier persona. Es decir, respeto, lealtad a sus principios y valores, ser decente y transparente. Pero un buen líder debe ir más lejos y tener determinación con sus metas y objetivos; porque la determinación lleva a que su grupo de trabajo (la gente a la que le está hablando) se inspire y crean en el proyecto en el que trabajo.  

 

Debe ser bueno trabajando en equipo y comunicándose. Uno debe tener la capacidad de comunicar lo que verdaderamente quiere y hay que saber a quién y cómo transmitir el mensaje. Uno tiene que saber cómo trabajar en equipo. Es casi imposible estar en la política si uno logra trabajar en equipo. Por último, un buen líder tiene que ser transparente. El país ha sufrido mucho con la corrupción y las mentiras. La transparencia es sinónimo de confianza y el aspecto más importante de un líder es que sea confiable.  

 

J.M: Hay diversas formas para liderar, y uno suele confundir el liderazgo con la persona. Yo personalmente creo que liderar es una responsabilidad muy grande. Personalmente yo aplico mucho lo que es la honestidad, trato de ser muy honesto con todo lo que digo, con todo lo que hago y con la gente que conozco. Creo que la disciplina también es fundamental porque sin disciplina no se llega a cumplir con los objetivos.  

 

5.  ¿Cuál es el mayor reto que ha encontrado en su campaña?  

 

M.B: ¡Pues a ver, retos hay todos los días! Uno se encuentra con una pared o un obstáculo todos los días, pero, para mí el mayor reto es aprender cómo sobrepasar todos y cada uno de esos pequeños obstáculos que uno se encuentra en el camino. También es complicado porque uno piensa que esto le gusta a todo el mundo y que la gente siempre lo va a estar apoyando. La verdad es que este es un mundo difícil que no le gusta a mucha gente y hay veces que uno se puede sentir solo.  

 

J.M: Personalmente creo que han sido dos los mayores retos. El primero es que normalmente la gente tiende a subestimar a los jóvenes candidatos y creen que no tenemos voz ni voto porque nos hace falta experiencia. El segundo es salir a la calle. Salir no es común para un joven y en lo personal no me gusta la atención pública, así que salir a conocer a tanta gente y tratar de que me conozcan es duro. Sobre todo, porque a uno lo juzgan por cosas que ni siquiera conocen. Es un reto difícil, pero uno lo aprende a manejar.  

 

6.   ¿Ha tenido alguna preparación para la campaña? ¿En qué consiste? 

 

M.B: Como te venía diciendo, yo creo que este es un mundo donde hasta que uno no lo viva en carne y hueso, no puedes comprenderlo completamente. Este proceso lo empecé a principios del semestre pasado. El Centro Democrático hizo algo muy chévere que es escoger la lista de candidatos a la JAL de manera democrática; es decir, fue una consulta interna del partido que, junto con la registraduría, se abrió a la ciudadanía. Esto me permitió comenzar campaña desde febrero del año pasado. La consulta fue para mí la mejor manera de aprender de mis errores, porque pude identificar que se debe hacer y que no. Logré estructurar un equipo y definir los pilares fundamentales dentro de la campaña. Esta experiencia me permitió vivir una especie de campaña inicial para la consulta que me preparó para lo que se viene estos próximos meses.   

 

J.M: Me he preparado profesionalmente y mi campaña ha estado de la mano de la doctora Lucy Hernández, que es una señora que maneja el Centro Democrático dentro de Chía y Cundinamarca y junto a ella nos hemos enfocado en hacer estrategias de administración pública, manejo de recursos y planear como manejar la sociedad teniendo en cuenta las diversas opiniones que la gente ofrece. Es importante escuchar a los demás para avanzar de buena manera y siempre hay alguien que sabe más que uno sobre distintos temas y sus consejos nos ayudan a ser más eficaces.  

 

7. ¿Cuál es el mayor error que ha cometido durante su campaña y que hizo para resolverlo?  

 

M.B: La vida es un constante aprendizaje, así que no puedo decirte cual ha sido mi mayor error durante la campaña. Diría que un error del cual aprendí bastante fue no haberme organizado extremadamente bien desde el principio. Es clave para una campaña organizarse en todos los aspectos y sobre todo estar en armonía con el equipo. Hay que establecer metas y a partir de ellas trazar un plan de acción que se construye en el día a día. Si no hay organización solo se está improvisando y lo último que quiero es que mi campaña sea improvisada. ¡Gracias a Dios ya tuve la consulta para reestructurar! pude conversar con mi equipo de trabajo y preguntarles ¿Cómo podemos mejorarlo? Y así fue como juntos trazamos un plan de acción para tener algo muy organizado y estructurado.  

 

J.M: Es muy pronto para decir que se ha cometido un error hasta el momento. Pero si tuviera que resaltar algo diría que es la mentalidad de joven con la que uno llega. Uno piensa que puede comerse el mundo, pero hay que ser consciente que en la política se maneja mucho lo que es el ego. Además, muchas personas solo por el hecho de verlo a uno joven no toman en cuenta la opinión de uno.  

Al ser precavidos y al tomar en cuenta muchos factores externos que uno al principio no toma, puede que llegue a un mejor resultado y logré evitar grandes problemas.  

 

8. ¿Quiénes son las personas que cree que van a votar por usted? ¿Quién es su elector ideal?  

M.B: No tengo un público selecto que vote por mí. Todas las personas que crean en mí y en mi proyecto, están invitadas a votar por mí, es más, para mí sería un honor que me dieran su voto. Mi mayor responsabilidad es representar a las personas que se sientan identificadas conmigo, siendo el edil la conexión más próxima que tiene un ciudadano con la administración; la función que tengo es ayudarte a resolver esos problemas mínimos que tienes en tu día a día, (esos que siendo bobos son los que más te importan).  

Mi elector ideal son todas aquellas personas que se sienten inseguras en su localidad, que están decepcionadas de su Gobierno, que al fin y al cabo no se sienten representadas ni distrital, ni territorial, ni nacionalmente, esas son las personas que espero voten por mí. 

 

J.M: mi votante ideal son los jóvenes, no importa su inclinación política. Espero que los jóvenes vean en mí una persona con la que puedan identificarse y que pueda aportarles una luz en este gran mundo que es la política. 

 

9. ¿Cuál es su mayor objetivo si queda electo? 

 

M.B: Yo creo que es importante que la gente entienda que un edil no puede hacer propuestas como podría hacerlas un alcalde. Lo que sí hace un edil es: control político, control fiscal y control social. Mi mayor objetivo es y seguirá siendo representar a las personas que no se sientan escuchadas por este gobierno y que se sientan ignoradas por la administración local, por medio de mi gestión pretendo volver a Chapinero la localidad más segura. Al mismo tiempo mi objetivo personal, es ser esa persona con la que los jóvenes se sientan identificados, y vean en mí un proyecto a largo plazo, una voz representativa a futuro.  

 

J.M: Mi mayor objetivo sería darle voz a la gente, proveer un espacio donde puedan entender qué es lo que se hace dentro del Gobierno, porque muchas veces la gente (electores) vota y se desentiende o no logra entender qué es lo que un concejal o una persona dentro de la administración del municipio hace. Quiero que entiendan un poquito más lo que el cargo significa y además explicarles en qué consisten las decisiones del Concejo, a que conllevan y de donde salen.  

10.        ¿Cree que existe alguna creencia, estereotipo o prejuicio sobre los candidatos jóvenes frente a los que llevan años en el campo?  

M.B: Es algo a lo que he tenido que enfrentarme y creo que en todos los ámbitos, no solo en la política, las personas relacionan la palabra juventud con inexperiencia y eso asusta un poco. Frente a esto, mi punto de vista es que en este país hay un rechazo muy fuerte por la política, específicamente por políticos, por eso cuando yo dije que quería ser edil, todo el mundo a mi alrededor se sorprendió e intentó que me retirara. Yo solo pensaba que la gente no se da cuenta de la influencia que tienen los políticos en nuestra vida, como una mala decisión de un político nos afecta a todos. Mi invitación es a que se pregunten ¿en manos de quién quieren dejar esa responsabilidad? Por esto, es importante apoyar nuevos liderazgos, jóvenes que quieran empezar desde las bases a preparase y a construir país.  

 

Por esto sostengo que, juventud no es sinónimo de experiencia, juventud es el momento de la vida de adquirir la experiencia y esto solo se logra cuando nos dan la oportunidad.  

 

J.M: Si, he sentido este prejuicio. Como lo decía anteriormente (en la respuesta 7) muchos de los candidatos e incluso gente del partido que lo ven a uno joven, con ideas muy distintas y contrarias a lo que ellos piensan entonces me “rechazan” o me toman de menos. He visto que este prejuicio se ve más en los candidatos al Concejo que son “mayores” o tienen mucha más experiencia. Y seguramente es gente con mucha experiencia que lleva trabajando en campañas políticas hace ya vario tiempo, pero si intentan disminuirnos y no nos dan el puesto que merecemos. Sin embargo, uno tiene que aprender a manejarlo, ser muy paciente y tranquilo para afrontar esas situaciones. 

 

11. ¿Qué lo diferencia del resto de candidatos? ¿Qué resaltaría de su personalidad?  

M.B: No me gusta compararme con el resto de las personas. Cada candidato aporta un elemento diferente y es lo esencial para que funcione correctamente la democracia. Dicho eso, mi aporte es llegar a construir sobre lo que está construido y no solo polarizar. A nivel personal mi resiliencia y mi pasión hacen la diferencia en todo lo que hago, eso sé qué la comunidad lo nota en los debates, en los encuentros en las calles, en el día a día. También me diferencia que yo no estoy aquí por temas personales, yo estoy aquí porque siempre he tenido un gusto por ayudar a las personas, a mí me apasiona el trabajo por la comunidad, el servicio social y por eso estoy aquí.  

J.M: Yo creo que lo que me diferencia del resto de candidatos es que tengo una motivación distinta a lo económico; no es un secreto que muchas veces los gobiernos y los candidatos políticos van tras factores económicos, porque al fin de cuentas, como dice un compañero mío, la política es un negocio. Yo me enfoco en la labor social. Me enfoco más en proveer y ser una persona servicial que escucho más a la gente.  

 

 

¡Muchísimas gracias a los dos candidatos por el tiempo y la entrevista! 

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