CULTURALES
El legado de un movimiento revolucionario en el cine colombiano
La revolución caleña que transformó
el cine en Colombia
Caliwood, un movimiento cinematográfico nacido en Cali en los años 70, rompió con las narrativas convencionales del cine colombiano. Un grupo que desafió las estructuras tradicionales con películas críticas, visualmente innovadoras y comprometidas socialmente.
Fuente: Pexels
Por: Manuela Ocampo Bustamante
Cali, la sucursal del cielo, la ciudad de la salsa y también la cuna de la industria cinematográfica que marcó un cambio en la historia del cine colombiano. Más conocido como Caliwood o el grupo de Cali fue un movimiento que revolucionó el cine en Colombia y puso los ojos del país en la capital del Valle del Cauca.
Todo surgió por los años 70, donde un grupo de jóvenes cinéfilos, liderados por Andrés Caicedo, Carlos Mayolo y Luis Ospina se reunieron con el objetivo de contar sus propias historias de una manera completamente diferente. Cansados por las narrativas comunes e impuestas y los estereotipos decidieron contar historias que reflejan la realidad de su ciudad y del país. Siendo así un movimiento cultural que desafió lo tradicional y abrió nuevos caminos para la creación de películas mediante la experimentación de lenguajes cinematográficos innovadores, abordando temas tabúes, explorando la diversidad de la sociedad colombiana y haciendo fuertes críticas a ciertas problemáticas sociales.
A su vez, las películas del grupo de Cali se caracterizaron por su compromiso social y político, denunciando injusticias sociales, violencia y desigualdad. Películas como “Agarrando pueblo”, “Todo comenzó con el fin”, “Oiga vea”, “Pura sangre”, se convirtieron en referentes de la región y el país. De hecho, la película “Agarrando pueblo” hace una crítica contundente a la pornomiseria en el cine documental. Puesto que este falso documental habla de la explotación de la miseria en la ciudad de Cali, criticando a los cineastas que utilizan la pobreza y el sufrimiento para crear contenido “conmovedor”. Lo interesante de esta película es que utiliza el humor negro y la ironía para contar la realidad de este tipo de documentales. En donde a los cineastas no les interesa realmente ayudar a la comunidad, sino un producto audiovisual que pueda competir en festivales nacionales e internacionales y generar reconocimiento.
Además del contenido crítico que producía Caliwood, este grupo también era reconocido por su estética visual, influenciado por el expresionismo alemán, el cual se caracteriza por una subjetividad absoluta, objetos asimétricos, exageración de los movimientos y la actuación, iluminación de alto contraste y, sobre todo, se caracteriza por ser un movimiento político. Precisamente, el hecho de romper con los estándares comunes del cine implica una revelación contra las estéticas clásicas, al igual que lo hacía el grupo de Cali. Estos realizadores utilizaban planos secuencia, cámara en mano, entre otros recursos visuales que permitían un estilo único.
Aunque el grupo de Cali se enfrió con los años, su legado sigue vivo. Las películas realizadas por Caliwood continúan siendo exhibidas en festivales de cine y universidades. Además, tanto Carlos Mayolo como Andrés Caicedo y Luis Ospina son considerados pioneros del cine colombiano. Ya que demostraron que el cine puede ser una gran herramienta para transformar el pensamiento social y poner en el ojo público situaciones que han sido normalizadas. A su vez, este grupo, al contar historias auténticas y romper los esquemas, se convirtieron en inspiración para nuevas generaciones que cineastas, que, durante los años, han enriquecido el panorama cinematográfico en Colombia.
Hoy en día, Caliwood sigue siendo un referente para el cine colombiano para aquellos cineastas y productoras independiente que mantienen viva la llama del cine caleño. De hecho, en el 2008 se creó el Museo Caliwood, la cual se destaca por su gran colección de aparatos cinematográficos, fotográficos, gráficos y fonográficos que muestran la evolución de los equipos de filmación de películas colombianas y del occidente del país. Además, este museo resalta la gran influencia que han tenido y mantienen los directores de cine nacidos en Cali. Siendo así un homenaje a la historia del cine caleño.
Es importante reconocer la importancia de este grupo, que, si bien se desvaneció con el tiempo, tiene un futuro prometedor. Ya que las nuevas generaciones de cineastas están explorando nuevos formatos y lenguajes para contar historias innovadoras y seguir contribuyendo a promover el cine en Colombia. Esta es una muestra de que nuestro cine tiene muchas narrativas novedosas y criticas para ofrecerle al mundo. También termina siendo una fuente de inspiración para aquellos que creen en el cine como un arte para transformar la sociedad. Esta también es una invitación par que como colombianos apoyemos nuestro cine, porque mediante nuestro interés por este, podamos seguir financiándolo para que se siga produciendo y podamos convertirnos en un exponente de cine a nivel internacional.